Friday, November 21st 2008, 4:00 AM
El actor argentino Leonardo Sbaraglia interpreta a un asesino en "Epitafios", de HBO Latino.
Hijo de la profesora de teatro y actriz Roxana Randón, Leonardo Sbaraglia conoció desde muy temprano el oficio de actor, con una maestra en casa.
Así comenzó su carrera, primero en la televisión, con el seriado juvenil "Clave de sol", del que se sigue sintiendo orgulloso.
“A los 17 años trabajé no en una telenovela, pero sí en una serie para adolescentes, y me siento muy orgulloso de eso porque aprendí muchísimo trabajando ahí, crecí muchísimo, entendí mejor el medio y me parece que muchas veces la televisión te da un oficio que no te da otro medio. Me da mucho orgullo cuando me entero que todavía lo siguen pasando”, comenta.
Sin embargo, lo que le abrió las puertas fue el cine.
Una de las últimas ha provocado bastante revuelo en España. Se trata de "Diario de una ninfómana", basada en una novela de la escritora francesa Valérie Tasso, sobre una mujer que termina en la prostitución.
“No elijo los personajes simplemente por los personajes en sí, sino por todo lo que representan dentro de un guión y dentro de la historia”, dice Sbaraglia.
“A mí lo que más me interesa es encontrarme con un buen director, una buena historia y si además hay un buen personaje pues mejor todavía porque eso me va a permitir a mí más estímulo”.
“Me toque el personaje que me toque, siempre me gusta ser muy preciso para construirlo de una manera humana y creíble”, afirma.
Radicado en Madrid, España, el actor ha sido mayormente contratado para hacer cine argentino y español, como en el caso de "Diario..."
Pero fue la película mexicana "Amor, dolor y viceversa" que protagonizó junto a la actriz Bárbara Mori, la que lo dio a conocer más entre el público hispano que acudió al festival de cine de Tribeca en Nueva York este año.
“Llegué a este filme a través de dos lugares, de Filmax y el director Poncho Pineda. Supe que el director me tenía como una de las alternativas posibles para su película, logramos hablar por teléfono y eso fue lo que me terminó de decidir”, dice.
A principios de este año Sbaraglia regresó a su natal Buenos Aires, donde la productora PolKa estaba haciendo el rodaje de la segunda temporada (aún sin fecha de estreno) de la serie de HBO Latino, "Epitafios".
Allí, el actor interpreta al nuevo asesino en serie que se contrapone a los detectives Renzo Márquez (Julio Chávez) y Marina Segal (Cecilia Roth).
“Se trata de un esquizofrénico, con muchos matices y posibilidades expresivas, un personaje muy rico de construir. Pienso que este personaje de malo se me ha vuelto como una línea abierta, algo que quiero seguir haciendo”, señala.
Estuvo luego estrenando "Diario de una ninfómana" y "El rey de la montaña", dirigida por Gonzalo López-Gallego que el año pasado se presentó en el festival de cine de Toronto, Canadá pero aún no había llegado a España. También se estrenó este otoño "Santos", de Nicolás López, sobre un dibujante de cómics fracasado.
Mientras tanto, se lanzó en Estados Unidos, el DVD de la cinta "La pu... y la ballena", dirigida por Luis Puenzo y escrita por su hija Lucía, con quien el actor tiene contemplado seguir trabajando.
“Hay otros proyectos que se están terminando por confirmar, así que estoy bien, por suerte”, asiente.
Asimismo se las arreglará para pasar tiempo con su esposa, la escultora Guadalupe Marín y con su hija Julia de 3 años.
“Ser padre me ha cambiado la percepción de la vida, ahora me tengo que ocupar 24 horas de otra persona y aunque no esté presente todo el tiempo, tratamos de viajar, ir y venir y mantenerme alerta”, dice.
El actor argentino Leonardo Sbaraglia interpreta a un asesino en "Epitafios", de HBO Latino.
Hijo de la profesora de teatro y actriz Roxana Randón, Leonardo Sbaraglia conoció desde muy temprano el oficio de actor, con una maestra en casa.
Así comenzó su carrera, primero en la televisión, con el seriado juvenil "Clave de sol", del que se sigue sintiendo orgulloso.
“A los 17 años trabajé no en una telenovela, pero sí en una serie para adolescentes, y me siento muy orgulloso de eso porque aprendí muchísimo trabajando ahí, crecí muchísimo, entendí mejor el medio y me parece que muchas veces la televisión te da un oficio que no te da otro medio. Me da mucho orgullo cuando me entero que todavía lo siguen pasando”, comenta.
Sin embargo, lo que le abrió las puertas fue el cine.
Una de las últimas ha provocado bastante revuelo en España. Se trata de "Diario de una ninfómana", basada en una novela de la escritora francesa Valérie Tasso, sobre una mujer que termina en la prostitución.
“No elijo los personajes simplemente por los personajes en sí, sino por todo lo que representan dentro de un guión y dentro de la historia”, dice Sbaraglia.
“A mí lo que más me interesa es encontrarme con un buen director, una buena historia y si además hay un buen personaje pues mejor todavía porque eso me va a permitir a mí más estímulo”.
“Me toque el personaje que me toque, siempre me gusta ser muy preciso para construirlo de una manera humana y creíble”, afirma.
Radicado en Madrid, España, el actor ha sido mayormente contratado para hacer cine argentino y español, como en el caso de "Diario..."
Pero fue la película mexicana "Amor, dolor y viceversa" que protagonizó junto a la actriz Bárbara Mori, la que lo dio a conocer más entre el público hispano que acudió al festival de cine de Tribeca en Nueva York este año.
“Llegué a este filme a través de dos lugares, de Filmax y el director Poncho Pineda. Supe que el director me tenía como una de las alternativas posibles para su película, logramos hablar por teléfono y eso fue lo que me terminó de decidir”, dice.
A principios de este año Sbaraglia regresó a su natal Buenos Aires, donde la productora PolKa estaba haciendo el rodaje de la segunda temporada (aún sin fecha de estreno) de la serie de HBO Latino, "Epitafios".
Allí, el actor interpreta al nuevo asesino en serie que se contrapone a los detectives Renzo Márquez (Julio Chávez) y Marina Segal (Cecilia Roth).
“Se trata de un esquizofrénico, con muchos matices y posibilidades expresivas, un personaje muy rico de construir. Pienso que este personaje de malo se me ha vuelto como una línea abierta, algo que quiero seguir haciendo”, señala.
Estuvo luego estrenando "Diario de una ninfómana" y "El rey de la montaña", dirigida por Gonzalo López-Gallego que el año pasado se presentó en el festival de cine de Toronto, Canadá pero aún no había llegado a España. También se estrenó este otoño "Santos", de Nicolás López, sobre un dibujante de cómics fracasado.
Mientras tanto, se lanzó en Estados Unidos, el DVD de la cinta "La pu... y la ballena", dirigida por Luis Puenzo y escrita por su hija Lucía, con quien el actor tiene contemplado seguir trabajando.
“Hay otros proyectos que se están terminando por confirmar, así que estoy bien, por suerte”, asiente.
Asimismo se las arreglará para pasar tiempo con su esposa, la escultora Guadalupe Marín y con su hija Julia de 3 años.
“Ser padre me ha cambiado la percepción de la vida, ahora me tengo que ocupar 24 horas de otra persona y aunque no esté presente todo el tiempo, tratamos de viajar, ir y venir y mantenerme alerta”, dice.
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